Un nuevo capítulo de la saga "Reflexiones" me ha venido a la cabeza al ver ésta noticia en Vandal.
Antes de empezar con lo que dicha noticia ha disparado en mi enferma cabecita (ahora mismo estoy con algunas décimas de fiebre), debo confesar que no soy un ferviente admirador de la saga. Para mi, los buenos capítulos de la saga son los primeros, muy en especial el primero de todos, un juego que he completado dos veces y que puedo decir muy orgulloso que me encanta. Debo decir que he probado todos y cada uno de los posteriores capítulos principales (me falta alguno de portátil por probar), y son juegos que de alguna manera, siempre acaban formando parte de mi colección y suelo dejar abandonados antes de terminarlos.
Desde este artículo, tan solo pretendo enumerar las cosas que yo cambiaría en la saga Zelda, cosas que no me gustan nada y que logran lastrarme la experiencia. Y vaya por delante que soy el típico que siempre pica ante las campañas de marketing de las que goza la saga, con esa épica melodía y esos brillantes colores.
1. Los malditos diálogos
Esto es con diferencia lo que más rabia me da de toda la saga. Es cierto que la saga no cuenta con grandes historias que contar. Suele ir por faena, salva a la princesa, libera al mundo del maléfico poder que amenaza con destruirlo todo y acaba el juego con un ambiguo desenlace en el que no sabes si Link y la princesa llegan a más o no. Y no es que sea criticable, ojo. Es obvio que la saga Zelda apuesta sin tapujos por la jugabilidad más allá de la historia, cosa que sinceramente me parece digna de todo respeto.
Sin embargo, no puedo evitar mirar al suelo, armarme de paciencia, contar hasta 3 y tratar fútilmente de perdonar el hecho de que los personajes del mundo de Zelda hablen como retrasados mentales. Si. Así es como hablan en los mundos de Zelda. Como mucho sueltan una palabra, y todo el resto son murmullos, exclamaciones, grititos, suspiros y todo tipo de onomatopeyas.
Hay quien piensa que tratan de darle ese aire añejo que recuerda a Nintendo 64 y a "The Legend of Zelda: Ocarina of Time". A mi no me la dan. El hecho de que Zelda no esté doblado correctamente se debe única y exclusivamente a la desidia de Nintendo. Y digo más. Aunque lograra convencerme de que en verdad es esa búsqueda de lo añejo, en mi opinión la saga debería tratar de superar al mito en lugar de emularlo. Señores, las "nuevas" tecnologías os brindan un nuevo umbral que explotar. No estamos en 1998.
2. El diseño de personajes
A mi me gustaba el diseño de los personajes de la saga Zelda en Nes o SuperNes. Era desenfadado, divertido y humorístico. Y tenía un aspecto muy importante que en Nintendo parecen haber olvidado: Cohesión.
No es normal que tengamos a un Link que aunque no abandona la línea anime sea cada vez más serio y adulto, y los personajes del mundo sigan teniendo cabezas enormes, mocos colgando y todo tipo de parafernalia digna de un aula de P4. Y ojo, que no critico el aire infantil en un juego. En muchos juegos es divertido y hasta de agradecer. Pero lo que no es normal es que optemos por un protagonista serio y todos los demás personajes sean jorobados, leprosos, deformes o con una cabeza que abulta como dos veces Link.
3. El control
Un control muy poco preciso en todos los juegos de Zelda que he tenido el placer de jugar. Y no es ironía. Es un placer jugarlos. Hasta que te encuentras con que Link parece flotar más que moverse, y que las animaciones hacen que acercarse a un bordillo para dar un salto encarando bien la dirección sea una tarea tediosa de pulsar botones para centrar la cámara, acercarse lentamente, pararse a centrar a Link, y luego darle adelante para que el personaje salte solo. Y el que no admita ésto, que sé que habrá varios... MIENTE VILMENTE.
Lo primero que tenéis que cambiar es lo de que Link parezca flotar en lugar de moverse, y luego ya me cambiáis lo del salto, que ya cansa, y mucho.
Resumiendo:
Esos son los 3 principales puntos que cambiaría de la saga Zelda. Es cierto que no me agradan muchos otros, pero entiendo que forman parte inherente de la saga y que no podrían cambiarse. Como depender siempre de la princesita de marras, y que la trama sea siempre tan previsible que parezca que es la quinta vez que juegas al juego.
Sobretodo, no quiero que se me vea con un Zelda-Hater, nada más lejos de la realidad, de hecho pico siempre y acabo comprando. El problema es que no me gusta la dirección que tomó la saga desde que saltó a las 3 dimensiones.
Y me atrevo a lanzar un desafío a Nintendo. Si de verdad el señor Aonuma está pensando en darle un cambio importante a la saga... ¿Por qué no cambiarle el género?. Convertir a la saga Zelda en un RPG, con combates por turnos, un mundo que siempre fue maravilloso en libre de explorar y a una princesita cuya misión en la vida es ser raptada por el malo en un personaje controlable con magia de apoyo (por ejemplo) podría renovar la saga por completo, ampliar el mundo de juego, el público de la saga y la dimensión épica que podría llegar a adquirir. A mi me gustaría mucho... ¿y a vosotros?
Para mi zelda siempre sera zelda y como incodicional de la saga no veo necesario grandes cambios,pulir pequeños detalles si,como por ejemplo que aprendan a hablar.
ResponderEliminarEs un juego que sale cada dos o incluso tres años y a mi por ejemplo no da pie a cansarme siempre del mismo desarroyo.
A veces cuando quieren dar un vuelco a una saga para mi humilde opinion suelen estropearlo,vease el caso de Final Fantasy,Shining Force con esas pateticas versiones en PS2 o Resident Evil.
Pienso que si algo es bueno para que cambiarlo,perderia la esencia.
Un saludo
Lo ultimo que le cambiaría a un zelda seria el modo de combate.
ResponderEliminarLo que si le cambiaría seria que link pudiera tener un poquito más de personalidad, decir algo más que un "ah!, oh!, mmmm...," xD. Para mi eso es lo peor de un zelda y se lo cambiaría YA.